jueves, 12 de agosto de 2010

Nostálgico del comunismo


¿Cómo puede ser? ¿gente en pleno siglo XXI que reivindica a la ideología que mató 100 millones de personas y que generó tanta pobreza? Si amigos, pero no todo es tan así. Hay una razón por la cual soy "nostálgico del comunismo".


En primera instancia, como dice la Declaración ideológica del sitio:

_Aún sin coincidir en lo ideológico, también reivindicamos distintos movimientos históricos (revoluciones, repúblicas, estallidos sociales, guerras populares) que han expresado la misma voluntad popular que hoy defendemos, sin dejar de lado que nuestra actualidad es distinta.

Las revoluciones socialistas siempre fueron populares. Rusia, China, Cuba, Vietnam... siempre fueron llevadas a cabo por los trabajadores o los campesinos contra gobiernos opresores, invasiones o regímenes coloniales. Que después se hayan desvirtuado es otra cosa.

Reinvidicarlos a ellos sería como reivindicar la Revolución de Mayo o el Congreso de Tucumán. Es reivindicar las ocasiones en donde la voluntad del pueblo se hizo notar. Y reivindicar también las ideas y acciones de quienes fueron la voz de esa voluntad popular: Lenin, Trotsky, Mao, Fidel, el Che...

La segunda objeción: los famosos "100 millones de muertos". Eso es una payasada. Juntar a toda la gente que murió en todos los gobiernos socialistas es absurdo. Si fuera por eso podríamos juntar toda la gente que murió por los gobiernos capitalistas desde el 1500 hasta ahora y no nos alcanzarían los números.

Aparte de que esa compilación deja mucho que desear. Se toman en cuenta gobiernos totalmente diferentes uno del otro (como el de Pol Pot, que era opositor a Vietnam y la URSS), se ponen en igualdad de condiciones a grupos guerrilleros con gobiernos y no se diferencia entre presos comunes, perseguidos políticos o víctimas en guerras, ni tampoco entre catástrofes naturales o desastres ambientales. Claramente eso de los "100 millones de muertos" es una falacia. 

Y finalmente, lo de la pobreza. Puede ser que en los países socialistas durante la década del '70 y el '80 hayan habido crisis económicas. Quienes tomaban la rienda de los países del bloque del Este por aquel entonces eran inoperantes totales.

Pero algo es seguro: ningún país consiguió nada abandonando el socialismo. Basta ver como Rusia y los demás países que tuvieron gobiernos comunistas tras la caída del muro y la "apertura democrática" cayeron en la pobreza, bajaron su calidad de vida, llegaron las privatizaciones y la concentración de la riqueza, aumentó la delincuencia, creció la inestabilidad política y la mayor parte de esos países se convirtieron en satélites de los yanquis. Y sus desgraciados inmigrantes en Europa Occidental deben ganarse la vida prostituyéndose o mendigando en las calles.

¿Y en América Latina? Los países de Centroamérica y el Caribe que no siguieron el camino de Cuba tuvieron la oportunidad de tener niños muertos de desnutrición o por enfermedades curables, y sus ciudadanos pudieron irse a EEUU a ser discriminados y segregados. Y en Sudamérica las dictaduras que nos salvaron del maléfico comunismo nos regalaron las privatizaciones y varios años después el benéfico Consenso de Washington.

Entonces por eso es que reivindico al viejo comunismo. Porque EN SU MOMENTO y EN SU ÉPOCA fue lo mejor que le pasó a sus países. Claro que con el tiempo hubo errores, pero si el remedio era abandonar el socialismo, ese remedio terminó siendo mortal.


Hay que mejorar cosas, claro. Los tiempos cambian. Pero toda experiencia popular pasada sirve.

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